Comer más de tres veces al día previene la obesidad
Hacer más comidas al día y no solo limitarse a desayuno, almuerzo y cena, reduce el riesgo de obesidad y de síndrome metabólico en jóvenes con sobrepeso, a pesar del aumento energético que supone. Esta es la conclusión de una investigación publicada en la revistaInternational journal of obesity, que añade un nuevo efecto beneficioso a las dietas con horarios regulares y sin comidas copiosas.
Numerosos estudios han corroborado en las últimas décadas un vínculo entre el incremento de las comidas y la aceleración del metabolismo, con la consiguiente pérdida de peso. La presente investigación, sin embargo, es la primera en analizar la relación entre la frecuencia de ingesta, el metabolismo y la adiposidad visceral en jóvenes con exceso de grasa corporal y de procedencia hispana, puesto que son los más propensos a desarrollar este tipo de desórdenes.
El equipo de científicos de la Universidad de Texas (EE.UU.) encontró una correlación entre un número elevado de comidas al día y unos niveles más bajos de insulina en ayunas, lo que va acompañado de una disminución de la resistencia insulínica, responsable de la inadecuada acción lipogénica y la tendencia a la obesidad abdominal. Los resultados revelaron también que quienes comían con más asiduidad, tenían niveles más bajos de triglicéridos circulantes, cuyo exceso contribuye al endurecimiento y el estrechamiento de las arterias, pudiendo desembocar en síndrome metabólico. El estudio, sin embargo, no contempló la influencia de la actividad física en la frecuencia de comidas.